"Maternity Eternity" (2003), (c) Melissa Caro, view72.com.
Reflexión sobre la maternidad
Nahomi Galindo Malavé
Tomado de El Nuevo Día.
Hace algunos días se publicó una noticia que bien podría ser el trama de una película de terror mal titulada: Una mujer está embarazada... ¡de 12 bebés!. Aunque la historia se intentó pintar “bonita”, (incluía foto intrauterina), me heló la sangre.
Era como ver la vida de abnegación y sacrificio de nuestras abuelas condensada en 9 meses y glorificada como un ejemplo a emular.
El colmo de la obsesión promovida por los sectores fundamentalistas en la modernidad tardía, auxiliados por la alta tecnología y los medios masivos.
A diferencia de nuestras abuelas la protagonista de esta historia, eligió su destino. La mujer tuvo abortos involuntarios y se sometió a tratamientos de fertilidad. Su único deseo: “Abrazar a sus seis niños y seis niñas”. Desea los 12 fetos aunque los médicos le han dicho que la probabilidad de que nazcan vivos es de 1% y que su vida peligra.
Sin duda, la experiencia de la maternidad varía de mujer en mujer. Para algunas, preparadas para tener hijos o no, ya sea económica o mentalmente, es una gran alegría. Otras, aun preparadas, se enfrentan a decisiones difíciles. A las que toman la difícil decisión de terminar su embarazo de forma segura y legal (opción no disponible antaño), a menudo se les proyecta como monstruos, asesinas, malas mujeres.
Sin ánimo de ofender a quienes eligen tener muchos hijos (se trata de poder elegir), mucho más monstruosa y grotesca me parece la noticia de que una mujer tendrá 12 hijos de golpe, y que esto se celebre.
Cabe preguntarse, ¿no es irresponsable arriesgar su propia salud y vida, privando así de su madre a las criaturas que lanzará al mundo? ¿No es irresponsable exponer la salud y el bienestar de las que llegasen a nacer? ¿No contradice su deseo de ser madre la posibilidad de que tanto ella como muchas de las criaturas no sobrevivan el intento?
Todo este drama es muestra del extremo al que ha llegado la obsesión con la maternidad que se ha vuelto hegemónica en nuestra era globalizada.
A pesar de que la protagonista es de Túnez, el tema repercute en Puerto Rico.
Además, muestra cómo los medios de comunicación contribuyen, de manera consciente o no, a construir socialmente una imagen glorificada de la maternidad, a menudo de forma irresponsable.
Las profundas contradicciones y limitaciones de este discurso quedan reveladas cuando la maternidad se sobrepone, incluso, a la salud y a la vida.
Nahomi Galindo Malavé es activista feminista y de derechos humanos, y miembro de la Junta Editora de Apuesta.
Nahomi Galindo Malavé
Tomado de El Nuevo Día.
Hace algunos días se publicó una noticia que bien podría ser el trama de una película de terror mal titulada: Una mujer está embarazada... ¡de 12 bebés!. Aunque la historia se intentó pintar “bonita”, (incluía foto intrauterina), me heló la sangre.
Era como ver la vida de abnegación y sacrificio de nuestras abuelas condensada en 9 meses y glorificada como un ejemplo a emular.
El colmo de la obsesión promovida por los sectores fundamentalistas en la modernidad tardía, auxiliados por la alta tecnología y los medios masivos.
A diferencia de nuestras abuelas la protagonista de esta historia, eligió su destino. La mujer tuvo abortos involuntarios y se sometió a tratamientos de fertilidad. Su único deseo: “Abrazar a sus seis niños y seis niñas”. Desea los 12 fetos aunque los médicos le han dicho que la probabilidad de que nazcan vivos es de 1% y que su vida peligra.
Sin duda, la experiencia de la maternidad varía de mujer en mujer. Para algunas, preparadas para tener hijos o no, ya sea económica o mentalmente, es una gran alegría. Otras, aun preparadas, se enfrentan a decisiones difíciles. A las que toman la difícil decisión de terminar su embarazo de forma segura y legal (opción no disponible antaño), a menudo se les proyecta como monstruos, asesinas, malas mujeres.
Sin ánimo de ofender a quienes eligen tener muchos hijos (se trata de poder elegir), mucho más monstruosa y grotesca me parece la noticia de que una mujer tendrá 12 hijos de golpe, y que esto se celebre.
Cabe preguntarse, ¿no es irresponsable arriesgar su propia salud y vida, privando así de su madre a las criaturas que lanzará al mundo? ¿No es irresponsable exponer la salud y el bienestar de las que llegasen a nacer? ¿No contradice su deseo de ser madre la posibilidad de que tanto ella como muchas de las criaturas no sobrevivan el intento?
Todo este drama es muestra del extremo al que ha llegado la obsesión con la maternidad que se ha vuelto hegemónica en nuestra era globalizada.
A pesar de que la protagonista es de Túnez, el tema repercute en Puerto Rico.
Además, muestra cómo los medios de comunicación contribuyen, de manera consciente o no, a construir socialmente una imagen glorificada de la maternidad, a menudo de forma irresponsable.
Las profundas contradicciones y limitaciones de este discurso quedan reveladas cuando la maternidad se sobrepone, incluso, a la salud y a la vida.
Nahomi Galindo Malavé es activista feminista y de derechos humanos, y miembro de la Junta Editora de Apuesta.